La leche condensada tiene unas calorías de aproximadamente 420 por cada 100 gramos. Según la OMS, la leche condensada es una buena fuente de proteínas, hierro y calcio. Además, tiene un bajo contenido en grasas saturadas y azúcares. Entre sus beneficios, destacan: que aporta energía, es una buena fuente de nutrientes, ayuda a mantener el peso y protege contra enfermedades. Sin embargo, tiene ciertas contraindicaciones, como que puede contribuir a la obesidad, favorecer el desarrollo de caries dentales y aumentar el riesgo de padecer cáncer de mama.